LPND sigue creciendo y se complace en presentar a un nuevo integrante del staff: Mario H. Trubiano es periodista deportivo desde 2002 y hace cuatro años lleva adelante el distinguido "Esférico Balón".
30.04.2010 - Mario Trubiano - Son tiempos en los que las palabras River y descenso se están relacionando como nunca antes en la historia. Como se sabe, el Millonario comenzará la temporada 2010/2011 muy comprometido, a tal punto de arrancar, de no mediar cambios en las últimas fechas del presente Clausura, en la última posición sin contabilizar los equipos que asciendan de la B Nacional.
Sin embargo hubo un tiempo en que River, como Boca e Independiente y la mayoría de los equipos, jugó en el ascenso argentino. Fue entre 1905 y 1908, época amateur casi ignorada en nuestro fútbol, como si no hubiese sido la piedra fundacional de este deporte en el país. Y los comienzos no fueron en la segunda división sino en la tercera categoría de la por entonces Argentine Football Association.
Su primer partido lo disputó el 30 de abril de 1905 ante Facultad de Medicina: fue derrota 2-3 y dos de los goles del rival los marcó Bernardo Houssey, quien en 1947 recibió el Premio Nobel de Medicina. La campaña se asemejó a las actuales: fue penúltimo y quien ocupó la última colocación no se presentó en la mayoría de los encuentros.
Al año siguiente se inscribió para jugar en Segunda (aún no se habían implementado los ascensos directos) y finalizó sexto. En 1907 perdió la final por el pase a Primera por 1-0 con Nacional, equipo integrado por empleados de la famosa tienda Gath & Chaves.
En 1908, River se refuerza con varios futbolistas del conjunto que le había privado de subir de categoría y que fue desafiliado porque no se querían equipos representantes de firmas comerciales aunque se esgrimió como argumento que era porque no tenía su cancha en condiciones. Así se sumaron Morroni, Abaca Gómez, Chagneaud, Chiappe, Cambón y Politano, el primer gran goleador de la historia millonaria. Una gran campaña lo lleva al título que le permite subir a la máxima divisional, derrotando a Ferro en semifinales por 5-1 y a Racing en una única final jugada dos veces: el 13 de diciembre gana 2-1 pero los directivos de la institución de Avellaneda protestan por la invasión de campo del público millonario tras el segundo gol. El partido vuelve a disputarse 14 días más tarde, en el estadio Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, con una inapelable 7-0 (2 de Grifero, 2 de Politano, 2 de Chiappe y uno de Abaca Gómez).
Desde entonces River apenas se codeó con el ascenso a principios de los ochenta cuando la instauración de los promedios evitó que baje de categoría. De esta parte a un año veremos si nuevamente puede gambetear el descenso o, para sorpresa de muchos, si será tiempo de volver a la B…
FUENTES:
CLARIN.
No comments:
Post a Comment