Rogelio Funes Mori

29.03.2010 - No hay suficientes respuestas para la búsqueda de razones del rating deprimido de los partidos de fútbol de nuestra querida Primera División. Se elaboraron tesis atadas con alambres a intereses que es mejor no mencionar pero es insoslayable que el nivel futbolístico es el cómplice en cuestión.

Si tomamos que al Fútbol para Todos le tocó una temporada donde Boca, Ríver, Rácing y San Lorenzo penan en el fondo de la tabla, poco queda por dilucidar.

Pero si le sumamos que Ríver vaya televisado un lunes, el día más resistido de la semana, donde empiezan, como los crónicos castigos de Prometeo, los sacrificios del mundo trabajador y consumidor de fútbol, cuál diversión, distensión o alegría (?) podríamos inferir que en el calendario televisivo (que comanda el calendario futbolístico) existe una mano negra (?).

Si seguimos sumando podríamos apuntar, en complicidad, al cuerpo técnico (y/o dirigencia) riverplatense (?) que, teniendo en el banco a Mauro Rosales insiste con poner de titular a Funes Mori… un lunes.

Argentinos Júniors le ganó a Ríver (1-0) en el Monumental, bajo la suela de Ortigoza, la gambeta de Coria y los piques de Sosa (autor del gol ´20) haciéndole precio en el primer tiempo y regulando (dejándolo venir a Ríver) cuando las piernas ya no daban, en el segundo.

No podemos decir que le falta actitud a Ríver. No le falta actitud, ni ingenuidad, ni inconexión, e imprecisión. ¡Mi puesto por una brújula! Puede bramar Astrada.

Ver a Almeida multiplicarse (sólo para destruir), a Rojas y Afranchino jugar mirando a su arco, a Canales en el círculo central, a Ferrari contra molinos de viento… como si todos llegaran hasta ahí para que alguien (?) se haga cargo y meta la pelota en el arco contrario…

Rogelio Funes Mori (?)

El pibe (18) que salió de Buenos Aires a Dallas para ganar el “Sueño MLS” (reality), viajar a Inglaterra para practicar con el Chelsea y volver a Buenos Aires para probarse en Ríver y en seis meses pasar de quinta a Primera, no sólo no aprendió aun a moverse según la ley del off side sino que, en excelso homenaje al mejor Cuqui Silvani, le erra a la pelota tantas veces como Astrada insiste en ponerlo de titular.

Es demasiado para un lunes.

Hasta mañana.