30.06.2010 - Wilde
Las ubicaciones en los asientos del ómnibus que traslada a la selección argentina respetan (siempre) el inamovible orden establecido.
El primero en bajar es (siempre) Carlos Bilardo y el último es (siempre) Ariel Garcé.
Messi baja (siempre) chupando un chupetín.
Tévez (siempre) de auriculares blancos.
Durante los viajes en ómnibus (nunca más) se canta.
Mascherano, el capitán, (siempre) encabeza la salida del equipo al campo.
Heinze (siempre) cierra la formación de juego y Maradona la global.
Maxi Rodríguez (siempre) entra a la cancha con pie derecho y persignación.
Mascherano (siempre) entra a la cancha con pie derecho y persignación.
Heinze (siempre) entra a la cancha con pie derecho y persignación.
Higuaín (siempre) entra a cancha saltando tres veces con el pie derecho.
El equipo (siempre) escucha el himno de brazos entrelazados.
El cuerpo técnico (siempre) escucha el himno de brazos entrelazados.
La foto inicial del equipo (siempre) respeta posiciones según titularidades y puestos.
El cuerpo técnico se acomoda en el banco de suplentes (siempre) de izquierda a derecha: Signorini, Enrique, Maradona y Mancuso.
El masajista, Marcelo D´Andrea, (siempre) espera con una toalla y una botella de bebida deportiva que Romero llega a buscar para llevárselas al arco.
Después del sorteo entre capitanes, Mascherano (siempre) se acerca al masajista, a darle el banderín y tomar un sorbo de agua.
Pitazo inicial: Maradona, que (siempre) usa el mismo traje, (siempre) se persigna tres veces.
Maradona da la conferencia de prensa previa a cada partido (siempre) en el Loftus Versfeld Stadium, la sede de Pretoria (donde concentra Argentina) aunque la FIFA pedía que se realicen en el estadio donde se jugaran los partidos.
Hasta ahora, la delegación argentina, incluso ante el viaje a Polokwane (Peter Mokhaba Stadium, Argentina 2 Grecia 0) logró modificar el programa pero esta vez la FIFA se opone: el Loftus Versfeld de Pretoria ya no recibe más partidos mundialistas y será cerrado.
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