Los tiempos electorales producen imágenes desiguales, momentos memorables y – sin escarches programados ni zancadillas de oficio - situaciones incalculables, imprevistas o temerarias. Los políticos salen a visitar vecinos a lugares que jamás visitaron y jamás volverán a visitar. Hombres de cuentas millonarias y ropa italiana recortados del barro y las moscas no son cosa de todos los días pero sí, quizás, una especie de mínimo termómetro social.
Jorge Pereyra de Olazábal, directivo del exclusivo Jockey Club, ex presidente de la extinta UceDé, amigo íntimo de María Julia Alsogaray, director de la Casa de San Luis en Buenos Aires y candidato a legislador porteño por el “Frente Es Posible” (extraña coalición liderada por los puntanos Rodríguez Saá) descubrió por estos días que fútbol y pobreza no dejan de convivir en Buenos Aires: se bajó en la villa 21/24 de Barracas (foto), acompañado de Irma Jala (una de las jefas del lugar) “Y la verdad fue interesantísimo, penoso pero interesante”.
En un momento, cerca de una canchita de fútbol, el candidato que corre a Macri por derecha, se chocó de frente con la realidad cuando un joven corpulento y “totalmente dado vuelta” (paco), se le abalanzó y le dijo: “Eh, ´cumpa´, vos vas a estar en mi equipo” agarrándolo de los brazos. “Y yo, que no soy grandote, pero soy valiente, lo agarré a él y le dije que no podía, que no tenía ropa. Fue una experiencia apasionante que me sirvió para darme cuenta de que Macri no hace nada en la ciudad”.
Jorge Pereyra de Olazábal, directivo del exclusivo Jockey Club, ex presidente de la extinta UceDé, amigo íntimo de María Julia Alsogaray, director de la Casa de San Luis en Buenos Aires y candidato a legislador porteño por el “Frente Es Posible” (extraña coalición liderada por los puntanos Rodríguez Saá) descubrió por estos días que fútbol y pobreza no dejan de convivir en Buenos Aires: se bajó en la villa 21/24 de Barracas (foto), acompañado de Irma Jala (una de las jefas del lugar) “Y la verdad fue interesantísimo, penoso pero interesante”.
En un momento, cerca de una canchita de fútbol, el candidato que corre a Macri por derecha, se chocó de frente con la realidad cuando un joven corpulento y “totalmente dado vuelta” (paco), se le abalanzó y le dijo: “Eh, ´cumpa´, vos vas a estar en mi equipo” agarrándolo de los brazos. “Y yo, que no soy grandote, pero soy valiente, lo agarré a él y le dije que no podía, que no tenía ropa. Fue una experiencia apasionante que me sirvió para darme cuenta de que Macri no hace nada en la ciudad”.
Para ver algo mas sobre Barracas: BLOG DE LA ASOCIACION CIVIL VIENTOS DEL SUR - VILLA 21/24 BARRACAS
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