Copa América 2011: semifinales sin favoritos.

18.07.2011 - El nivel de juego y el césped de los campos puede ser un mosaico de esta Copa América 2011, más esperada por empresas que por delegaciones (?). A una organización muy criticada se le suman partidos de bajo vuelo con estadios llenados a tickets de protocolo. Y ahora... finales sin favoritos.

La paridad latinoamericana se manifiesta en tres de los cuatro partidos de cuartos de final dirimidos luego de 120 minutos (dos de ellos por penales).

Las 4 selecciones que se llevaban las probabilidades de semifinal (Argentina, Brasil, Colombia y Chile) cayeron después de haber doblegado a sus rivales (Uruguay, Paraguay, Perú y Venezuela) en el campo.

Brasil y Argentina (los favoritos principales) se retiran de la competición invictos mientras que Paraguay pasa a semifinales después de haber empatado sus 4 partidos.

Argentina haciendo la peor Copa América en su país (de 8 veces como anfitrión, había logrado 6 títulos, 1 subcampeonato y 1 cuarto puesto) se fue eliminada después de hacer a Muslera (arquero uruguayo) unánime figura del partido.

Brasil se fue eliminado después de pelotear a Paraguay, encumbrar a Justo Villar (arquero paraguayo) y errar 4 penales (de 4 ejecutados), récord en su historia sólo superado por Honduras (5) a nivel selecciones.

Chile vapuleó a Venezuela y cayó (en 90 minutos) con una Vinotinto que pasa a semifinales (por 1º vez en su historia) con 2 victorias y 2 empates después de 15 Copas en las que había jugado 49 partidos de los que ganó 2, empató 9 y perdió 38.

Colombia doblegó a Perú en su trámite, Falcao erró un penal, Guarín rompió el travesaño y en tiempo suplementario Lobatón rompió el arco cafetero que venía invicto, para poner a Perú entre los cuatro mejores después de 4 torneos (desde 1997).

Atacantes vencidos. Conservadores triunfantes. Tácticas, estrategias, equipos sobre estrellas, suerte, malos campos y suprema paridad construyen el devenir exótico de una Copa América que muestra revelaciones (Venezuela), identidades establecidas (Chile), sobrias evoluciones (Perú) y una garra latina (Uruguay - Paraguay) que estremece y previene una Eliminatoria mundialista no apta para pronósticos ni cardíacos.

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