Gary Medel.

Gary Medel pertenece al extraño segmento de deportistas tocados por la varita mágica del talento pero que a la vez le dan de un corazón más grande que su pecho capaz de hacer cambiar el estado de ánimo de todo un estadio.

Talento y cojones tiene de sobra, eso nadie lo puede discutir. El hombre a pesar de ser de pocas palabras, sabe como tocar la fibra de sus compañeros y levantarlos. Comete errores pero es algo común para un tipo de 21 años quien declaró que de no haber sido futbolista sería narcotraficante o delincuente.

Se ha mandado embarradas gigantes, como chocar borracho sin documentos, escupir rivales, exponer a su equipo a quedar con uno menos pero también ha realizado hazañas increíbles, las cuales se recuerdan con más cariño.

La última cagada fue volcarse y solo quedar con contusiones, cuando en realidad debería haberse matado. La policía confirmó que había ingerido alcohol y que solo se quedó dormido al volante.

Tuve la suerte de ver a la UC 2008 y era increíble como el joven Medel se echaba al equipo encima y cambiaba la fisonomía de un plantel sin personalidad, sin actitud. Medel con el sólo hecho de ingresar al campo generaba seguridad en sus compañeros, quienes podían jugar un poco más tranquilos sabiendo que Pitbull le cubriría las espaldas y de paso, les solucionaría algún problema extra.

Se habló de San Lorenzo, Independiente, Boca Juniors, Fiorentina y hasta que el poderoso Milán seguía a este polifuncional seleccionado de Bielsa. En Chile y en la UC, todos saben que Medel se va, no hay discusión de eso. El debate está en adónde y en qué condiciones.

Hay muchos que dicen que se parece a Gattuso en su forma de juego. Sin embargo, Edgard Davids es la mejor comparación de Medel: se come la cancha, pero además, juega y hace jugar. Bielsa lo tiene de stopper por la derecha porque quita, toca y ataca, haciendo una dupla perfecta con Arturo Vidal.

El lo tenía claro. “Quiero pasar por Argentina primero y después Europa”. Es lo mismo que piensan muchos futboleros acá, el vértigo del fútbol porteño supera con creces al chileno y dar un salto a Europa cuando no se está 100% preparado es complejo. La única excepción que se me viene a la mente es Arturo Vidal, que de inmediato, luego de ser traspasado de Colo-Colo al Bayer Leverkusen, se instaló a jugar como si lo hiciera en el patio de su casa.

Sin embargo, los malos recuerdos hay por miles, el más reciente y lamentable, es lo que ocurre con Matías Fernández, un jugador con un talento único, pero que de ser un niño mimado en Colo-Colo pasó a un Villarreal con otras figuras y con un técnico que trata a sus jugadores como empleados y no como sus hijos. ¿Resultado? El mejor jugador de América haciendo banca y solo destacando en la selección, en un entorno en el cual todos los defienden.

Volviendo a Médel (como lo dicen ustedes), estoy casi seguro de que podría jugar en cualquier equipo del mundo y en cualquier circunstancia, pero prefiero que pase por Argentina para que sepa la presión de jugar un Superclásico, de tener que matarse para poder jugar y no matarse para ser la figura del partido como lo hace acá.

Se va, todos los chilenos lo saben. La cuestión que siempre está en duda es cómo podrán controlar su genio. Es un Pitbull que conoce a su amo, pero que por momentos pierde los estribos y es capaz de hacer cualquier cosa.

Hoy por hoy, Bielsa lo controla, habrá que esperar que el Fantasma Figueroa lo pueda hacer en la UC y que su futuro técnico también.

[por José Miguel Guerrero Meza, Chile]

PARA VER:
GOLES Y JUGADAS DE GARY MEDEL
EL ACCIDENTE DE GARY MEDEL
FANTASMA FIGUEROA